Las balizas de orientación son una parte fundamental en cualquier prueba de orientación organizada en la montaña. Si gestionamos una empresa dedicada a organizar este tipo de pruebas, debemos estar familiarizados con sus diferentes tipos y formas, así como con su colocación a lo largo de un trayecto.
Con ellas se informa a los participantes en una prueba de orientación sobre el recorrido de la carrera, ya que marcan los diferentes puntos a alcanzar. También pueden emplearse para alertar de un posible peligro.
Las balizas de orientación deben ajustarse a un formato concreto. De hecho, existen unos modelos reglamentarios que son de uso obligado para las carreras oficiales; los vamos a ver a continuación.
Aspecto reglamentario de las balizas de orientación
La Federación Internacional de Orientación (IOF, por sus siglas en inglés) es la que determina cuáles son las características técnicas oficiales de las balizas de orientación. De acuerdo con este organismo, estas señales deben tener un aspecto de prisma triangular y estar confeccionadas con tela, normalmente nailon. Deben ser en cada cara de forma cuadrada, con unas medidas de 30×30 cm, divididos en dos triángulos de color blanco y naranja. En algunos casos se pueden usar balizas de 15×15 cm.
¿Cómo es el soporte de la baliza de orientación?
Tan importante como la baliza es el soporte que la sujeta, aunque aquí no hablamos de un soporte oficial, sino de una gran disparidad de ellos dado que en muchos casos se recurre a lo que proporciona la propia naturaleza: una rama, una roca o un elemento del terreno. Aunque es menos habitual, también es posible ver alguna baliza sobre una valla. En muchas carreras se puede apreciar que se emplean como recurso estacas metálicas que se clavan en el suelo y que, por ello, tienen más resistencia al viento y a otras inclemencias del tiempo.
¿Cómo se deja constancia de que el corredor ha pasado por una baliza en concreto?
En una carrera de orientación es clave que se pueda determinar cuándo un corredor ha pasado por una baliza de orientación en concreto. Para ello, al lado de éstas se colocan unas pinzas de marcación que se emplean en la tarjeta de control, para dejar constancia de que se ha pasado por un punto.
Los organizadores son los responsables de la buena colocación de las balizas y de que tengan la visibilidad necesaria para cumplir plenamente con su función. Aunque el participante acude a la prueba con un mapa en el que expone el itinerario y una brújula para orientarse, será siempre obligación del organizador que las pinzas de marcación se encuentren en el lugar correcto, a la altura de los participantes. También deben resultar manejables para no entorpecer el desarrollo de la prueba.
¿Dónde adquirir balizas de orientación?
Podemos comprar balizas de orientación en tiendas especializadas, tanto físicas como online, aunque cada vez es más común encontrarlas en tiendas de deportes más generalistas. Si tienes interés en conocer el precio aproximado de estos indicadores, una baliza de 30×30 cm puede costar entre 3 y 10 euros, IVA incluido. Las pinzas marcadoras son más caras, y en cuanto a los soportes, el precio varía mucho.
Esperamos que esta información sobre balizas de orientación te haya sido de ayuda si tienes que diseñar próximamente un evento deportivo en el que las necesites.
