El seguro flyboard necesario para las empresas que se dedican profesionalmente
El Flyboard es una actividad que cada vez va adquiriendo más popularidad en verano en nuestras playas. Y, como todo deporte naútico, por supuesto, conlleva sus riesgos. Acerca de prever los peligros que puedan surgir, conocer la necesidad como empresa organizadora de tener un seguro flyboard y de saber cuáles son las claves para llevarlo a cabo, nos hablan desde Buggy Monstre, especializados en ésta y otras muchas modalidades multiaventura.
Importancia de tener un seguro flyboard si tienes una empresa dedicada a ello
Como bien atestiguan desde Buggy Monstre, “en el flyboard no hay riesgos pero conlleva sus riesgos” (valga la redundancia). Es decir, dependiendo de la habilidad de cada persona, el monitor realizará la actividad de un modo u otro. Por lo tanto, la capacidad del monitor para llevar al cliente será la base. “Si el monitor ve que la persona que está practicando este deporte no tiene habilidad, dará el gas mínimo”.
¿Qué es el flyboard?
Mediante esta actividad naútica sentimos la sensación de flotar en el aire. ¿Cómo? Con una tabla que llevamos bajo los pies. Esta tabla, a su vez, tiene dos chorros de agua que hacen que parezca que vueles sobre el agua. Tal y como explican en la web de Buggy Monstre, con este futurista aparato, se emplea la fuerza del agua para “volar” sobre las olas, e incluso quien lo realice, puede sumergirse y saltar como los delfines.
Por supuesto, con la ayuda de un instructor profesional, que es quien ayuda en todo momento a que el usuario conozca cómo estabilizarse y sacarle el máximo partido al flyboard.
Problemas que debemos prever si organizamos actividades con flyboard
Como hemos mencionado anteriormente, el instructor debe conocer previamente la capacidad de la persona que va a realizar flyboard. Un problema existente podría ser, por ejemplo, que quien lo practique se acerque demasiado a la moto acuática, pues cuanto más cerca esté, mayor riesgo hay. Recordemos que el flyboard se trata de una tabla que se encuentra unida a una moto acuática a través de una manguera larga. Mediante esta moto es como se conduce la tabla; el flyboard que se eleva y que ‘vuela’.
“Tener un seguro es indispensable
si organizas actividades como flyboard”
Posibles incidentes como golpes o lesiones hacen que tener un seguro flyboard sea “indispensable” -así lo califican desde Buggy Monstre- para quienes organizan este tipo de actividades naúticas, tan divertidas y recurrentes en época estival.
Una modalidad que se recomienda practicar desde los 16 años en adelante, a cualquier edad, “pues todo el mundo puede hacerlo”, afirman. Eso sí, como en todo lo que se realiza en el mar, siempre con la máxima prudencia y sentido común, tanto por parte de la empresa organizadora como de los aficionados a esta fascinante práctica de ocio náutico.
Un poco de historia
El flyboard es un invento relativamente reciente, pues sus orígenes se remontan al año 2012; y su precursor fue el francés Franky Zapata. Y su primer Campeonato Mundial fue en ese mismo año en Doha (Qatar).