3 minutos de lecturaEl rapel como parte de la oferta de actividades en la montaña

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El rapel, como una práctica deportiva vinculada a la escalada y descenso de barrancos, gana fuerza desde hace unos años. Se trata de un deporte al alza entre los amantes de los deportes al aire libre, los que aman lo extremo y los que, al mismo tiempo que se divierten, buscan una actividad de alta intensidad física. El rapel tiene todo ello y, además, puede practicarse en muchas épocas diferentes del año y en lugares muy distintos dentro de nuestra geografía. Por todo ello resulta interesante evaluar si nos interesa ofrecerlo en nuestra empresa turística de aventuras para ofrecer el mejor servicio. A continuación respondemos a varias cuestiones básicas sobre ello:

¿Qué equipo básico es necesario para practicarlo?

Descender paredes de gran altura, con pendientes acusadas, requiere de un equipo especial que debe constar de arnés de cintura o integral, mosquetón con seguro, cabo de seguridad o pata de anclaje, descensor, guantes y un casco que proteja tanto de la caída de piedras, como de posibles golpes. Además de todo ello, cuando se realiza en grupo es imprescindible además poseer cinta plana o una cuerda para anclaje, protectores para la cuerda como almohadillas y un mosquetón con seguro o, si no tienen seguro, dos.

¿Qué tipo de rapel ofrecer?

Hay que adelantarse a lo que el perfil de nuestros clientes puede demandar. Existen tres tipos diferentes de rapel; el de fricción con el cuerpo, el de fricción en mosquetones y el que se realiza con descensor. El rapel de fricción con el cuerpo puede efectuarse con mayor o menor dificultad. La técnica más compleja, recomendada solo para practicantes expertos, es la llamada Dulfer o ‘alemana’, de la cual la Comichi es una variante. Implica riesgo de quemaduras y caídas si no se cuenta con amplia experiencia y conocimientos técnicos, por lo que la mayoría del público optará por el conocido como ‘rapel de brazo’, que se practica en distancias cortas y paredes con poca inclinación. Los sistemas más empleados, por su seguridad, son los de ‘rápel con ocho’, con descendedor de poleas, con dispositivos tubulares, y ‘rapel con rack’ o ‘marimba’.

¿Merece la pena ofrecer un servicio de rapel si se trata de una técnica exigente?

Esa decisión dependerá de cuál sea el cliente tipo o target de nuestro negocio, pero en principio el hecho de que sea un deporte exigente a nivel físico no debería provocar que lo descartamos. Cada son más los interesados en él y el hecho de que su oferta no sea tan amplia como la de otros deportes hace más fácil fidelizar a sus practicantes. Por otra parte, el equipamiento que requiere no es más costoso que el de otras prácticas deportivas. Otro punto a su favor es que si tenemos una base afianzada de clientes que ya practican la escalada y el barranquismo y les ofrecemos el rapel con ofertas interesantes, éstos pueden animarse a probarlo.

¿Cuáles son los mejores lugares de España para realizar esta práctica deportiva?

Una de las ventajas que tiene este deporte es que no se limita a solo algunos lugares concretos en los que poder realizarse. En realidad, solo requiere de una pared elevada para su práctica, que incluso puede ser artificial. Eso sí, el escenario puede ser un valor añadido para un deporte concebido, por definición, al aire libre. Los lugares ‘estrella’ de la geografía española son el Pirineo catalán y el aragonés, la cordillera Cantábrica, la amplia cordillera Bética o sierras del Sistema Central como la Sierra de Gata y la Sierra de Gredos, por citar solo algunas de las más relevantes.

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