Sortear aguas turbulentas, afrontar los rápidos, sentir la adrenalina de la velocidad… el rafting se ha consolidado entre los aficionados de los deportes acuáticos y, en general, entre todos los amantes del deporte al aire libre. Como responsables de una empresa que se dedica a ofrecer estos servicios, debemos, además de brindar la mejor experiencia posible a nuestros clientes, ser conscientes de que con eso no basta. El emplazamiento en el que se practica el rafting es clave para llevar esta práctica del sobresaliente a la matrícula de honor. Y si en España abundan los lugares con encanto para practicarlos, hay algunas regiones que destacan por encima del resto. Una de ellas es Asturias, dueña de auténticas maravillas naturales, paisajes extraordinarios y lugares inolvidables.
Para saber dónde puedes ofrecer servicios de rafting en Asturias, hemos buscado para ti los mejores en los ríos Sella, Cares y Deva. Conócelos mejor con las sencillas indicaciones que puedes leer a continuación.
Rafting en Asturias: en el Río Sella
El descenso del Sella, uno de los ríos de referencia en la comarca de los Picos de Europa, es una de las actividades de rafting más divertidas que pueden realizarse en Asturias. Cuenta con unas aguas muy limpias y atraviesa zonas de especial valor medioambiental. El mes de marzo suele suponer el pistoletazo de salida para la temporada de rafting, que se prolonga hasta el mes de octubre. Es imprescindible que el río cuente con el caudal necesario para disfrutar al máximo. Un buen lugar para ubicar nuestras instalaciones de almacenamiento de equipos, aseos, etc… es la localidad de Cangas de Onís, con acceso sencillo. En cuanto a los tramos más interesantes, hay que destacar el que arranca en las cercanías de Camporriondi, dentro del desfiladero de los Beyos, y acaba en la localidad de Tornín. Cangas de Onís, por otra parte, es un municipio con gran encanto y enorme valor histórico, lo que permite ofrecer packs conjuntos de rafting junto a visitas culturales y otras.
Río Deva
El río Deva, también en la comarca de los Picos de Europa, es idóneo para el rafting. Con el Cares como afluente, este río que se adentra también en la vecina Cantabria posee tramos más que interesantes para ofrecer descensos de este tipo, como el que cubre la distancia que hay entre La Hermida (Cantabria) y Panes. En él se dan giros y zambullidas, pero siempre sin requerir un nivel de exigencia extrema. Es una buena forma de contemplar la fauna local, en la que destacan los patos y los martines pescadores. La primavera, pero también la época de lluvias, cuando su caudal aumenta, son las más indicadas para sacarle el máximo partido.
Río Cares
Afluente del Deva y mucho más corto que el Sella y el Deva, el Cares nace en la provincia de León y desemboca en el mar Cantábrico. Entre las localidades de Arenas de Cabrales y Trescares hay 10 kilómetros de distancia muy apetecibles para todo apasionado del rafting. Cada año son miles los visitantes que acuden a la Ruta del Cares, en el Parque Nacional de los Picos de Europa, para practicar el senderismo atravesando uno de los desfiladeros más emblemáticos de España. La ruta, de 11 kilómetros, tiene lugar entre los municipios de Caín y Poncebos. Se trata de una excelente oportunidad de negocio para ofertar un pack que aúne este actividad con el rafting.