Rafting, quads, tirolina, rutas en 4×4, tiro con arco, descenso en rapel, yincana… un negocio de multiaventura ofrece todas estas actividades y muchas más. Cada vez es mayor el número de clientes que prefiere no tener que elegir y disfrutar en un solo día de toda una serie de divertidas actividades al aire libre. Ofrecer la combinación de deportes idónea y programarla con acierto para satisfacer al cliente es solo una parte de un negocio en el que hay que cuidar más que nunca los detalles.
A continuación puedes ver algunas de sus claves:
1- Define el público hacia el que te quieres dirigir
Hay casi tantas actividades de multiaventura como clientes, en función de sus gustos, preferencias, edad, experiencia, estado de forma, etc. En general, podemos distinguir tres grandes grupos; niños, adultos y familias de varios miembros. Y, dentro del grupo de adultos, diferenciamos entre empresas y otras actividades, como por ejemplo las despedidas de soltero. Saber a qué público nos dirigimos no solo nos permitirá perfilar mucho mejor nuestra oferta de servicios, sino que también influirá en la política de comunicación y marketing que establezcamos. ¿Queremos centrarnos en escolares que terminan el colegio y comienzan las prolongadas vacaciones de verano? Un raid de aventura será una buena opción. ¿Preferimos orientarnos a despedidas de soltero? Primarán los deportes que conlleven acción y descargas de adrenalina, como el descenso de rápidos o las carreras de karts.
2- Reserva planes diferentes para las fechas especiales
La escasez de tiempo durante el día a día hace que muchos clientes esperen a las fechas marcadas en el calendario para disfrutar de una experiencia multiaventura. Si se acerca San Valentín puedes ofrecer un romántico paseo a caballo atravesando un paraje natural con encanto, completado con una contemplación de las estrellas cuando llegue la noche. O aprovechar que en esas fechas son comunes las pedidas de mano para brindar la oportunidad de sobrevolar en globo un paraje de gran belleza. En el Día del Padre y en el Día de la Madre piensa en una multiaventura apta para toda la familia. Y la llegada de las fechas navideñas es otra buena razón para proponer una jornada de actividades que se puedan realizar en invierno.
3- Asesora siempre sobre la ropa y el equipamiento
Como empresa debemos facilitar los materiales, vehículos o equipamientos de cualquier tipo con los que se van a realizar las actividades. Si, por ejemplo, contamos con excursiones en quad, además del propio vehículo, debemos facilitar casco, botas, guantes y otros. Para evitar confusiones, siempre hay que dejar claro los materiales básicos que se aportan, ya que correrán por cuenta del cliente otros como la ropa y el calzado deportivo, las gafas de sol, cremas protectoras para el sol, etc. Debemos tener en cuenta que somos nosotros los que mejor sabemos en qué va a consistir la jornada de multiaventura, y por lo tanto los que estamos en mejor situación para recomendar el uso de un forro polar en invierno, una capa cortaviento, viseras para el sol, etc…
4- No olvides la importancia que tiene la meteorología
Aunque parezca obvio, las condiciones climatológicas marcarán por completo las actividades que se podrán realizar. Consulta las previsiones para los siguientes días y avisa del riesgo de precipitaciones, viento y otros, en el caso de que los hubiera, a los clientes. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ofrece información fiable y segmentada por zonas y actividades. Además de todo ello, concibe planes alternativos para el caso de que haya que suspender lo programado. Por otra parte, en las condiciones de contratación de los servicios de su empresa debe figurar con claridad lo que sucede en el caso de la cancelación de una actividad por motivos meteorológicos.
