Operadores de turismo, agencias de viajes y empresas de deporte al aire libre han detectado cómo en los últimos años el turismo sostenible en España ha ido en aumento hasta el punto de convertirse en una tendencia en permanente crecimiento. Todos los actores implicados en el mundo de los viajes y el turismo saben a día de hoy que el turista es más consciente que nunca de la importancia del respeto por el medioambiente y la sostenibilidad. Aquellos lugares que sirven de escenario para el ocio son también, para el viajero, espacios que hay que respetar y tratar de conservar en su estado previo a la llegada del turista.
¿En qué se diferencia el turismo sostenible del turismo convencional?
La mayor diferencia tiene que ver con una gestión que da prioridad a la identidad y las particularidades del destino.
- Al contrario que el turismo tradicional o convencional, el sostenible evita la masificación y aboga por una experiencia personal del viajero, en el que éste sea capaz de disfrutar no solo del entorno natural sin alterarlo, sino también de la cultura y el patrimonio locales.
- La gestión de una empresa de turismo sostenible tiene en cuenta los ciclos de la economía local y sus tradiciones, las diferentes temporadas del año o la conciliación de sus empleados entre vida personal y vida laboral.
- Una gestión sostenible debe contribuir al progreso social y económico del territorio en el que tiene lugar el turismo que promueve. Se trata, por lo tanto, de generar recursos y riqueza y de crear empleo.
- Es prioritaria la contribución a generar un impacto positivo en las comunidades locales mediante el consumo de productos de comercio justo y la colaboración con proyectos de carácter solidario.
¿Por qué representa una verdadera oportunidad de negocio?
La Organización de Naciones Unidas (ONU) anunció que en 2017 se celebraría el Año Internacional del Turismo Sostenible, un fiel reflejo de su auge en todo el mundo. En España están en vigor importantes políticas públicas de apoyo a las Agrupaciones Empresariales Innovadoras (AEI) que se decanten por él y que pongan en valor la gran riqueza natural del país. En España existen nada menos que 48 espacios naturales declarados Reservas de la Biosfera y 15 Parques Nacionales (10 en la península, 4 en Canarias y 1 en Baleares). Centros de interpretación del entorno y otros espacios de acogida para visitantes ayudan a aumentar el interés por zonas de enorme interés.
¿Existen modelos de funcionamiento de turismo sostenible en España?
Sí, existen varios. La Carta Europea de Turismo Sostenible (CETS) recoge una treintena de espacios naturales protegidos en los que trabajan empresas turísticas que apuestan por la sostenibilidad y se han comprometido a la protección del medioambiente. Ejemplos destacados son el Parque Nacional de Garajonay, en la isla de La Gomera (Canarias), el Parque Natural del Delta del Ebro y el Parque Natural de la Garrotxa (Girona). Las Tablas de Daimiel (Ciudad Real) y el Parque nacional y natural de Doñana (Huelva), son otros dos ejemplos de espacios naturales españoles en los que operan empresas que ofrecen un turismo de elevado interés natural y ecológico salvaguardando los ecosistemas propios.